Estos días sufro de remordimientos acerca de la práctica de mis deportes favoritos, fútbol y correr, que en ocasiones son incompatibles. Se acerca una carrera importante como es la Media Maratón de Granada y me gustaría llegar en buenas condiciones (aunque me pasa como con el fútbol: en el momento final la cago), ello supone dejar el fútbol durante unas semanas para no tener las piernas muy cargadas y evitar lesiones o golpes.
Los remordimientos han sido tan grandes que he comenzado a flagelarme por las noches y así no disfrutar en exceso de los beneficios físicos que suponen el abandono de la práctica balompédica.
Pido perdón públicamente a Dios, es decir a Maradona, y espero que sea benevolente con mis pecados.
El Tirillas
2 comentarios:
Todo eso suena muy bién,pero primero la obligación y luego la devoción tus deberes con la PALETILLA ¡¡¡SON LO PRIMERO O CAERÁ TODA LA IRA DEL PRESIDENTE SOBRE TI!!!(Juanjo mejor la ira que no el peso).
Si quieres de verdad redimir tus pecados flagelandote en vez de castigarte tú deja que te de yo y veras como la próxima lo piensas primero.
a.muñoz
gracias Antonio por presentarte voluntario para infringir el castigo, lo he estado pensando mejor y dado que no me gusta sufrir mucho, la única penitencia que me impongo es la de aguantar un segundo más cada vez que tenga ganas de orinar.
El Tirillas
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